Amenazas en Hospital Garrahan: Residentes Ceden Ante Presiones del Gobierno y Exigen Renuncia del Consejo de Administración
En un contexto de tensión laboral, el Hospital de Pediatría Juan P. Garrahan se encuentra en el ojo de la tormenta. Los médicos residentes, que desde hace semanas venían sosteniendo un paro en reclamo de mejoras salariales, se vieron forzados a levantar las medidas de fuerza tras recibir amenazas de despidos y la advertencia de que serían reemplazados por médicos pediatras. La situación ha generado un clima de tensión y malestar entre el personal de la salud.
La jefa de clínica del área de Hematología del Laboratorio Central del hospital, Carolina Goedelman, denunció públicamente las presiones ejercidas por el gobierno de Javier Milei y las autoridades del centro de salud. Según su testimonio, las amenazas comenzaron con un aviso a los jefes de los residentes sobre la posible contratación de médicos pediatras para reemplazarlos. Posteriormente, los propios residentes recibieron telegramas en los que se les advertía que, de no cesar las medidas de fuerza, podrían enfrentar sanciones que incluían el despido. La presión verbal se sumó a las comunicaciones formales, con la advertencia de que los telegramas de despido ya estaban redactados y listos para ser enviados.
La Asociación de Profesionales y Técnicos del Garrahan expresó su solidaridad con los residentes y repudió lo que consideraron un intento de silenciar el reclamo mediante presiones institucionales. A pesar de la decisión de levantar el paro, el personal de planta del hospital ha decidido continuar con las medidas de fuerza y ha solicitado la renuncia del Consejo de Administración, integrado por El Kik, Menehem, Dalmazzo y Pérez.
