La industria metalúrgica argentina enfrenta una de las peores crisis de la última década
La industria metalúrgica de Argentina ha sufrido una fuerte contracción durante el mes de abril de 2024, con una caída interanual del 19,5%. Este descenso representa una de las más pronunciadas de los últimos ocho años, solo superada por los meses más críticos de la pandemia en 2020. La situación se agrava al acumular una retracción del 8,6% en los primeros cuatro meses del año, según datos del Departamento de Estudios Económicos de la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA).
El uso de la capacidad instalada también ha disminuido significativamente, alcanzando un 13,4% por debajo del mismo período del año anterior y un 8% inferior al promedio de 2023. La caída interanual se ha reflejado en todos los subsectores de la industria, con contracciones que llegan a superar el 20% en rubros como Carrocería y remolque, Fundición, Equipo Médico y Bienes de Capital. En contraste, el sector de Maquinaria Agrícola ha mostrado una menor caída, del 15,2%, a pesar de continuar con más de un año de disminuciones en su producción.
La cadena de valor de la industria también ha sido afectada, con empresas vinculadas a las cadenas de petróleo, gas y minería experimentando contracciones menores en comparación con el resto. Por el contrario, las empresas proveedoras de las cadenas de valor de la construcción y el consumo final han sufrido caídas más pronunciadas, reflejando la disminución en la obra pública y la actividad de la construcción en general.
A pesar de la grave situación, el nivel de empleo en el sector ha mantenido una relativa estabilidad, con una contracción del 0,5% en comparación con el mes anterior. El presidente de ADIMRA, Elio Del Re, ha destacado la necesidad de promover la inversión para impulsar el desarrollo de la industria nacional, advirtiendo sobre el impacto negativo que podría tener el Régimen de Grandes Inversiones (RIGI) propuesto en el proyecto de Ley Bases, al generar competencia desleal con los productos importados y profundizar aún más la caída de la producción y el empleo.