Violencia institucional: dos casos que conmocionan a la sociedad argentina
En un contexto de creciente preocupación por la violencia institucional, dos sucesos recientes han generado conmoción en la sociedad argentina. En Berisso, provincia de Buenos Aires, la Secretaría de Seguridad Ciudadana llevó a cabo un allanamiento que resultó en la detención de un hombre acusado de maltrato animal. Durante el procedimiento, se incautó un arma de fuego y municiones, lo que llevó a la aprehensión del individuo, quien enfrenta cargos por infracción a la ley 14346. En otro incidente, en la localidad salteña de Aguas Blancas, la Justicia ha imputado a cinco suboficiales de la Gendarmería Nacional por el homicidio de un joven bagayero. El trágico suceso ocurrió durante un enfrentamiento en un cruce fronterizo ilegal, donde la víctima fue alcanzada por disparos de arma de fuego.
El caso de Berisso pone de manifiesto la labor de las fuerzas de seguridad en la lucha contra el maltrato animal, mientras que el incidente en Aguas Blancas evidencia la complejidad de las relaciones entre los trabajadores informales y las autoridades en zonas limítrofes. La situación se agrava con las acusaciones de corrupción y prácticas ilegales por parte de los uniformados, que incluyen la desaparición de mercadería y un supuesto “cobro de peaje”. La respuesta del interventor de la localidad, que anunció la construcción de un alambrado para contener el tránsito de bagayeros, y la visita de la Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, han sido objeto de críticas y controversia, especialmente tras la revelación de que el alambrado fue instalado de manera ficticia y que los Gendarmes continúan con reclamos salariales y de equipamiento.